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Foto del escritorLaura Leoz Dramaterapia

PERSPECTIVA

La semana pasada iba conduciendo en el coche cuando empecé a pensar en la diferencia que marca la perspectiva. Empecé a pensar en cómo cuando estoy conduciendo y los demás coches van a la misma velocidad que yo, no me parece que voy muy rápido, me parece que voy a una velocidad adecuada. Pero cuando estoy andando por la calle, me parece que estos mismos coches van a una velocidad más rápida y recuerdo los nervios que sentí al empezar a aprender a conducir y el descontrol que sentía al estar al control de una velocidad que sentía como fuera de control.


Este pensamiento duró unos minutos y luego seguí con otros pensamientos. Pero desde entonces el concepto de perspectiva ha ido apareciendo en diferentes momentos, de diferentes maneras y en diferentes contextos.


En el taller sobre transiciones que ofrecí el viernes pasado en Izarpe terminamos jugando con la idea del desequilibrio y la búsqueda instintiva de la vuelta a una sensación de equilibrio. Hay eventos, tanto internos como externos, que causan desequilibrio en nuestra experiencia del mundo y la vida. Como cuando yo empecé a aprender a conducir, el estar en control de un aparato que iba a una velocidad a la que no estaba acostumbrada a controlar, me desequilibró.


Poco a poco me fui adaptando y acostumbrando y cambié de perspectiva en mi relación personal con la velocidad. A veces eso es lo que necesitamos, un cambio de perspectiva que nos ayude a adaptar y acostumbrarnos al nuevo equilibrio que en un principio vivimos como un desequilibrio.


Otra manera de cambiar de perspectiva para volver a encontrar el equilibrio, es a través de nuestra relación con nosotr@s mism@s. Cuando aceptamos una parte nuestra que ha sido abandonada, ignorada, o rechazada, integramos una manera de ser y estar más completa y amplia, con lo que es más fácil mantenernos centrad@s y segur@s en quienes somos. Por lo que los eventos que antes nos descolocaban, nos desequilibraban, se viven como algo que ocurre a nuestro alrededor, pero no afecta al centro enraizado de quienes somos fundamentalmente.


Por esto es tan importante el trabajo de autoconocimiento y desarrollo personal. Pues así podemos empezar a ver qué partes de nosotr@s hemos dejado atrás, qué rechazamos y cuáles son los mensajes del inconsciente que dejamos de un lado. Podemos empezar a indagar por qué hemos tenido esas respuestas, de dónde nos vienen, y podemos empezar a tener una relación más consciente de escucha, aceptación y amor con quienes somos. Para así poder afrontar las dificultades y los desequilibrios de la vida como un árbol en la cima del monte. Enraizad@s y segur@s cuando vienen el viento, la lluvia, la nieve. En vez de ser la hoja que es arrancada de la rama, seamos el tronco del árbol que pierde las hojas, pero mantiene sus raíces.


Si quieres adentrarte en un proceso de autoconocimiento y desarrollo personal a través del movimiento y la imaginación, ¿Por qué no hacer una cita? Contacta conmigo para hacer preguntas o concertar una cita de terapia Sésamo.


Un abrazo


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