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  • Foto del escritorLaura Leoz Dramaterapia

EL MIEDO Y EL HUMOR

Este fin de semana ha sido Halloween y el Día de Tod@s l@s Sant@s. En el hemisferio norte, los días se acortan, empiezan a vencer la noche, el frío y los resfriados, y recogemos la última abundancia de la tierra.


Es interesante que casi todas las culturas han celebrado este momento demostrando un respeto hacia lo pasado, un reconocimiento del miedo que nos dan los cambios, la pérdida, el adentrarnos en la oscuridad, el tener que despedirnos de seres queridos, del sol, de la abundancia, de la comodidad del verano. El hecho de que estos miedos son expresados, compartidos, demostrados por rituales que repetimos año tras año y que muchas veces incluyen un elemento de humor, comedia y risa, nos indican exactamente las herramientas que necesitamos y tenemos a nuestra disposición para hacer frente a cualquier situación que nos haga sentir miedo.


El paso del tiempo, la pérdida de un ser querido, los cambios que están fuera de nuestra influencia. El otoño es una representación de todo esto y un reflejo en la naturaleza de procesos muy internos de cada ser humano.


Lo que nos enseñan estos festivales son la importancia de encontrar la manera de expresar esos miedos; tanto en disfraces, personajes imaginarios o reales, historias que reflejen nuestra realidad o en encuentros familiares, recordando a nuestros antepasados y nuestras raíces, contando nuestra historia personal y/o colectiva, cuidando del entorno físico que recuerda aquellas pérdidas que nos marcan.


Estas expresiones traen de por sí un compartir de esas expresiones, encontrar nuestra familia, nuestra comunidad donde esa expresión puede ser acogida y se puede unir a la del grupo, para dejar de ser yo con mi miedo y llegar a ser nosotr@s con nuestra experiencia.


Los rituales que muchas veces acogen a estas expresiones del miedo ayudan a contenerlos, a darles un espacio y tiempo seguro en el que se pueden soltar sin temer las consecuencias por que ese grupo, esa comunidad o familia con la que compartimos esa expresión de miedo lo va a aceptar e incluso celebrar.


El humor, la comedia y la risa van a ser parte de ese contenedor que ayuda a soltar esos miedos y que no sólo ayuda a soltarlos, si no también a dar un paso hacia la aceptación de ese miedo por nosotr@s mism@s, y con eso empezaremos a movernos en una nueva dirección en la que ese miedo no tendrá tanta fuerza y no nos impedirá tanto en nuestro camino.


¿Qué miedo tienes tú? ¿Cómo y con quién lo puedes soltar?¿A quién puedes ofrecerle ese mismo espacio para expresar y compartir?


Las sesiones de Terapia Sésamo crean este tipo de espacio y comunidad en el que expresar, compartir, soltar y reír, tanto individualmente con la terapeuta, como en un grupo terapéutico. Si quieres saber más o te interesa crear este espacio en tu vida, no dudes en contactar conmigo para descubrir cómo te puede apoyar la terapia Sésamo.


Un abrazo

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